Editorial Res Publica de noviembre de 2014
El
otro día tuvimos la oportunidad de visionar el video de “La voz de Gabilondo”
titulado: “Que
bien nos vendría un Presidente del Gobierno”[1].
Nosotros aún añadiríamos: “Y un Ministro del Interior y un Secretario General y
…”. ¿Es una percepción de estos redactores o en la Secretaría General hay más eco
que en el Valle de Arán? ¿Qué función tiene una Secretaría General que ignora a
los profesionales, internos y familiares?, es decir: el alma mater de la institución. O es que sólo persigue el silencio de los corderos. Le
proponemos una cosa al Sr. Yuste, quédese en su casa. Total, ¿qué más da?
¿Alguien se ha
preguntado cual es la política penitenciaria del Sr. Yuste? ¿cuál es su
percepción de la repercusión social de las medidas privativas de libertad?, ¿cómo
piensa que se debería progresar en el fin último de esas medidas?, ¿cómo hay
que mejorar la convivencia y la formación de los internos?, ¿cuál es el plan de
formación, aparte de cursillos de Word, a los profesionales?, ¿Qué protocolos de
seguridad, activa y pasiva, existen para el control de incidencias posibles en
la vida penitenciaria?. En resumidas ¿cuál es el criterio penitenciario?. Desde
luego, según la memoria de actividades que ha realizado, no existe.
Dedicarse a silenciar
los centros, burocratizar la institución, controlar el gasto, contratar
servicios de mantenimiento, utilizar lo que hay y si se puede ir amortizándolo,
es función de un administrador de fincas, no de un político. Es la función de un
edecán que deja languidecer la nave en el Mar de los Sargazos de la falta de
inversiones, de retos, de progreso, de iniciativa, mientras mantiene un geriátrico
con los sillones mullidos para la decadencia profesional de los alineados con el Partido Popular.
¿Cuál es el
criterio, y el impacto en su programa, ante la privatización de la vigilancia
exterior, o ante la Ley 15/2014 de “racionalización” del sector público y otras
medidas de reforma administrativa”, porque convoca a hurtadillas la Mesa
General de Negociación, que piensa del proyecto de presupuestos para el 2015, que
pasa con el Ébola y la incertidumbre que provoca?
¿Cual es el
programa? ¿Alguien sabe de otro caso en el que se presente una memoria de
actividades sin que previamente haya existido un programa estructurado mejor o
peor cumplido? No le vamos a quitar al Sr. Yuste el honor de ser el primero.
Sí, ¡qué bien
nos vendría tener un Secretario General!