lunes, 14 de julio de 2014

Elecciones delegados al congreso PSM 2014


El diccionario de la Real Academia de la Lengua, define como “soterrar”, “esconder o guardar algo de forma que no aparezca”, luego, de improviso, siempre aparece, ¡siempre!. Ya sé que la palabra “emboscado” nada tiene que ver con la anterior, pues su definición es “poner encubierta una partida de gente para una operación militar” y “entrarse u ocultarse entre el ramaje”, pero he aquí que hoy no dejo de darle vueltas a su posible homología.

            A mí, me pareció perturbador que, en las elecciones de ayer, 13 de julio de 2014, para elegir delegados en el próximo congreso del PSM, apareciera una lista alternativa a la única que, hasta el último momento, se había presentado. No por el hecho de que se presentara, ojala se hubieran presentado por lo menos seis, sino por el hecho, en sí, de que por una parte y por otra, no hubiese habido el suficiente diálogo para conocer, primero la existencia de esas sensibilidades alternativas y, segundo, para dársela a conocer al resto de militantes y que su elección fuese realmente posible con un mínimo de reflexión. De ello, yo, como miembro de la comisión ejecutiva debo autoinculparme de este criticable hecho en la parte que a los “organizadores” nos corresponde, eso sí minimizada por la puesta en nuestro conocimiento in extremis. Estoy convencido de que, de esta disfunción todos somos conscientes y a partir de este momento, con el aporte de la imprescindible información previa por la otra parte, no se repetirá más.

            Pero siguiendo escarbando en el asunto, por aquello de “inquirir curiosamente lo que está algo encubierto y oculto, hasta averiguarlo” me preocupa la cuestión de por qué no se da a conocer, por aquellos que tuvieron la iniciativa, sin ambigüedad y con la deseable anticipación, las razones de esa alternativa, máxime cuando hubo una pregunta directa a uno de los miembros de la citada lista, que hice yo mismo, y se contestó con un “alguna diferencia habrá cuando existe”. Poco ejercicio de trasparencia, que tanto se invocó por el aludido durante buena parte de la jornada, cuando ella la circunscribe a esa frase.

            Todo militante sabe, a poco que conozca el funcionamiento de su partido, quienes y cómo se promueve la lista de delegados propuesta por la Comisión Ejecutiva, en ella se designó, en una de las reunión periódicas, como representantes al Secretario General y a la Secretaria de Organización, ¿es obvio, no?, por su naturaleza, es la representación oficial. Poco se puede explicar de esa designación no ideológica sino de representatividad, pero ¿quién o quienes fueron los promotores de la segunda lista?, ¿en que reunión, cuya realización no se publicitó, se planificó esa lista?, ¿Cuáles son las motivaciones de esa disidencia que difiere de una simple representación orgánica?

            ¡Qué aburrida es la política!. Está claro que nos pasamos la vida viajando. Lo malo es que siempre hacemos el mismo trayecto, el de Málaga a Malagón; ¿será porque implementamos las mismas soluciones a problemas viejos?, ¿será por una sempiterna lucha cainita por el liderazgo?.

Tan necesario es solucionar los problemas del pueblo, que en ello trabaja el Grupo, como los problemas de la Agrupación y eso es cosa de la Comisión Ejecutiva.